Con el dato de inflación que publicó este martes el Indec, se corroboró que por segundo mes consecutivo la inflación le ganó a la tasa de interés y más en particular a la tasa de interés de los plazos fijos. De esta forma, con la inflación acelerándose en términos mensuales, las tasas de interés quedaron en la mira para que en las próximas 48 horas el Banco Central anuncie un nuevo aumento.
Puntualmente, el 3,9% del IPC de enero confirma que los depósitos a plazo fijo de enero perdieron al menos 0,62% contra la inflación. Los que se hicieron a partir de la suba de tasas del 6 de enero fueron remunerados con un interés del 3,25% mensual y los hechos en los primeros días del mes con el 3,08%.
Con la excepción de los meses de agosto y noviembre, los plazos fijos perdieron todos los meses de 2021 contra la inflación. En efecto, la pérdida sistemática comenzó en octubre de 2020 -incluso si en noviembre de ese año Miguel Pesce subió dos puntos la tasa de Leliqs al 38% nominal anual. Antes, solo marzo había mostrado tasas negativas en 2020.
En otras palabras, la suba de tasas del mes pasado fue insuficiente para cumplir con la exigencia del Fondo Monetario de que las tasas de interés sean positivas en términos reales. De allí que, como adelantó LPO, el mercado espere una suba hasta al menos el 42% anual (3,5% menual) y que venga apostando cada vez más por los únicos instrumentos que rinden contractualmente al menos lo mismo que la inflación, las Letras del Tesoro ajustadas por CER.
La semana pasada, Miguel Pesce había adelantado una suba próxima -aunque no inminente de la tasa- y había asegurado que la decisión final del Directorio del Banco Central se iba a tomar después de que el Indec diera a conocer la inflación de enero. Ya con el dato público, se espera que este jueves haya reunión del Directorio por la tarde y una vez cerradas las ruedas en los mercados el Banco Central dé a conocer su decisión.
Por ahora, como las nuevas Leliqs solo son a 28 días o 183 días, los bancos no vienen mostrando mucho interés por quedarse en instrumentos del Banco Central, en especial en los de más largo plazo. Entre la licitación del martes de la semana pasada y el de hoy, cayó 6,5% la cantidad de Leliqs colocadas. Igualmente este martes no se renovaron menos del 2% de los $550.000 millones que vencían.
En cambio, prefieren usar el margen de los encajes legales que tienen habilitado para volcarse a instrumentos de mayor rendimiento como las Letras del Tesoro y postergar el excedente hasta tanto el Banco Central confirme la suba de tasas de interés. El jueves vencen otros $343.000 millones en Leliqs.
Por su parte, hasta el momento ninguna entidad empresaria se ha manifestado en contra de la suba de las tasas de interés, incluso si las restricciones de fondeo y el encarecimiento del capital los convierte en los primeros damnificados de una inminente suba de la tasa de interés.